Los versículos sobre la consagración a Dios nos muestran la importancia de apartarnos para Su servicio y gloria. Romanos 12:1 nos exhorta a ofrecer nuestros cuerpos como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios. 1 Pedro 2:9 nos llama «pueblo adquirido por Dios» para proclamar Sus maravillas. Santiago 4:8 nos insta a acercarnos a Dios y purificar nuestros corazones. Estos versículos nos motivan a vivir una vida consagrada, dedicada a honrar y servir a Dios en todo momento.
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Éxodo 19:5
Ahora, pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los pueblos; porque mía es toda la tierra.
Levítico 20:7-8
Santificaos, pues, y sed santos, porque yo soy Jehová vuestro Dios. Y guardad mis estatutos, y ponedlos por obra. Yo soy Jehová que os santifico.
2 Crónicas 29:11
Hijos míos, no seáis negligentes, porque os ha escogido Jehová para que estéis delante de él para que le sirváis, y seáis sus ministros, y le queméis incienso.
Salmo 4:3
Sabed, pues, que Jehová ha escogido al piadoso para sí; Jehová oirá cuando yo a él clamare.
Salmo 30:4
Cantad a Jehová, vosotros sus santos, y celebrad la memoria de su santidad.
Proverbios 16:3
Encomienda a Jehová tus obras, y tus pensamientos serán afirmados.
Isaías 1:18
Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana.
Jeremías 29:13
Y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón.
Jeremías 31:3
Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia.
Daniel 12:3
Los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento; y los que enseñan la justicia a la multitud, como las estrellas a perpetua eternidad.
Mateo 22:37
Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.
Juan 15:16
No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé.
Romanos 12:1
Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.
1 Corintios 3:16-17
¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros? Si alguno destruyere el templo de Dios, Dios le destruirá a él; porque el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo es.
1 Corintios 6:19-20
¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.
2 Corintios 6:17-18
Por lo cual, Salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor, Y no toquéis lo inmundo; Y yo os recibiré, Y seré para vosotros por Padre, Y vosotros me seréis hijos e hijas, dice el Señor Todopoderoso.
Efesios 1:4
Según nos escogió en él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de él en amor.
Efesios 4:22-24
En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente, y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad.
Filipenses 2:13
Porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad.
Colosenses 1:22
Pero ahora os ha reconciliado en su cuerpo de carne, por medio de la muerte, para presentaros santos y sin mancha e irreprensibles delante de él.
1 Tesalonicenses 4:3
Pues la voluntad de Dios es vuestra santificación; que os apartéis de fornicación.
1 Timoteo 2:4
El cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad.
2 Timoteo 2:21
Así que, si alguno se limpia de estas cosas, será instrumento para honra, santificado, útil al Señor, y dispuesto para toda buena obra.
Hebreos 12:14
Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.
Santiago 1:27
La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo.
1 Pedro 1:15-16
Sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir; porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo.
1 Pedro 2:9
Pero vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable.
1 Juan 3:1-2
Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, que seamos llamados hijos de Dios; por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoció a él. Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es.
Apocalipsis 22:14
Bienaventurados los que lavan sus ropas, para tener derecho al árbol de la vida, y para entrar por las puertas en la ciudad.
Romanos 12:2
No os conforméis a este mundo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
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