Juan 6:37 Reina Valera 1960 | NVI | NTV | TLA
Juan 6:37 Reina-Valera 1960
Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; y al que a mí viene, no le echo fuera.
Juan 6:37 Nueva Versión Internacional
Todos los que el Padre me da vendrán a mí; y al que a mí viene, no lo rechazo.
Juan 6:37 Nueva Traducción Viviente
Sin embargo, los que el Padre me ha dado vendrán a mí, y jamás los rechazaré.
Juan 6:37 La Palabra (Hispanoamérica)
Todo aquel que el Padre me confía vendrá a mí, y yo no rechazaré al que venga a mí.
Juan 6:37 Traducción en lenguaje actual
Todos los que mi Padre ha elegido para que sean mis seguidores vendrán a buscarme; y cuando vengan, yo no los rechazaré.
Explicación y Reflexión Corta en Juan 6:37
Juan 6:37 es un versículo poderoso que habla sobre la relación entre Jesús y aquellos que confían en él. En este versículo, Jesús dice: «Todo aquel que viene a mí, yo no lo rechazaré«. Esta afirmación es significativa porque muestra la compasión y el amor incondicional de Jesús hacia aquellos que confían en él.
Jesús no rechaza a nadie que venga a él con humildad y fe. Él está dispuesto a recibir a todos, independientemente de su pasado, su cultura o su estatus social. Este es un llamado a la igualdad y la inclusión que es a menudo un mensaje olvidado en una sociedad que a menudo valora el éxito y el prestigio.
Este versículo también nos habla sobre la naturaleza de la fe. La fe en Jesús no es una simple creencia intelectual, sino una relación personal y viva que nos transforma. Al confiar en Jesús, estamos permitiendo que él nos brinde perdón, paz y esperanza.
Además, Juan 6:37 nos invita a reflexionar sobre nuestra propia relación con Jesús. ¿Estamos confiando en él y permitiendo que nos brinde vida eterna, o estamos tratando de vivir la vida por nuestra cuenta? ¿Estamos permitiendo que Jesús nos brinde perdón y paz, o estamos guardando rencor y culpa por nuestro pasado?
En resumen, Juan 6:37 es un llamado a los cristianos a tener una relación personal y profunda con Jesús y a confiar en él para brindarnos vida eterna. Al venir a Jesús con humildad y fe, podemos encontrar perdón, paz y esperanza en un mundo que a menudo nos deja insatisfechos.